La “hora de la cama” es muchas veces un momento complicado, tanto para padres como para hijos. Lo habitual es que los mas pequeños se resistan a ir a la cama por multiples razones. Lograr que los peques vayan pronto a descansar es fundamental para su bienestar y desarrollo. Aquí os dejamos unos consejos:
- Ambiente de descanso: importante que la luz sea adecuada (escasa o nula). Las condiciones ambientales, temperatura y humedad también son importantes.
- Horarios fijos: el organismo se adapta a los biorritmos y se prepara, tanto para descansar como para despertarse.
- Evitar azucares: ya que estimulan al niño
- Cenas ligeras: estómagos muy llenos dificultan la conciliación del sueño.
- Horas de sueño: es importante que el niño duerma las horas de sueño adecuadas a su edad.
- Establecer una rutina: algunas clásicas pueden ser leer un cuento o cantar una nana.
- Evitar monitores: tanto de televisión como de dispotivos moviles. Sus luces y sonidos dificultan la conciliación del sueño.
- Objeto favorito: como por ejemplo un peluche o una mantita les puede ayudar a asociar el momento con el sueño y a sentirse mas relajados.
- Nariz descongestionada: los mocos y la congestión, ademas de ser incomodos, pueden provocar despertares nocturnos.
- Dormir es bueno: debemos intentar que el momento de ir a la cama sea un momento feliz, no un castigo.